Dentro de la reforma integral de esta vivienda, acordamos con nuestro cliente llevar la cocina un paso más allá, convirtiéndola en el centro y corazón de la casa.
Para ello utilizamos tres estancias de la antigua distribución, creando un espacio que conecta con todos los demás, en donde vivir, disfrutar y sentir la cocina al máximo.
Para conseguir esta atmósfera tan singular y acogedora, seleccionamos materiales naturales como la madera para las puertas de los módulos de cocina, o el granito con un acabado abujardado para la encimera, un material que brinda sensaciones especialmente agradables al tacto.
Del mismo modo lo hace la barra superpuesta a la encimera de la isla, realizada en madera de roble macizo con cantos naturales.
La cocina presenta una integración de los electrodomésticos completa, destacando entre ellos la campana extractora empotrada en el techo con acabado en blanco, que hace que pase totalmente desapercibida y no dañe visualmente el ambiente.
Interiorista: Johanna Restrepo
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