Teníamos muchas ganas de publicar este proyecto, porque es perfecto para mostrar cómo reformar una cocina, incluyendo todas las comodidades que deseaban sus propietarios, a pesar de contar con una planta compleja para trabajar.
Se trata de una estancia bastante amplia que, sin embargo, tiene algunas limitaciones que condicionan la manera en que podemos intervenir. Aun así, y convirtiendo algunas de estas limitaciones en nuestras aliadas, conseguimos dotar a esta cocina de zona de agua, cocción, zona de lavado, office, península y vinoteca, entre otras novedades
Divide y vencerás: cómo aprovechar cada rincón al máximo
En lugar de isla decidimos instalar una península, más apropiada para este proyecto, que juega varios papeles: además de aportar una superficie extra para trabajar, hace de separador de ambientes entre la zona de trabajo y office sirviendo, además, de respaldo en la zona de bancos.
Junto a la zona de trabajo instalamos un pequeño cuarto de lavado, independiente de la cocina, que contiene la lavadora secadora y oculta la parte posterior del horno y el microondas. Así, al colocar los electrodomésticos en esta zona, dejamos suficiente espacio en la bancada principal para instalar un frigorífico de gran capacidad que, gracias a su acabado en los mismos tonos grises que esta parte de la cocina, es prácticamente invisible.
De esta manera, damos forma a un nuevo espacio cómodo y muy funcional, donde disfrutar al máximo todas sus prestaciones.
Un espacio moderno y lleno de detalles
En este caso, el espacio llama la atención por la combinación infalible entre el blanco y la madera en el mobiliario (que se extiende a buena parte del office), en una estancia en la que el suelo es también de madera. Una opción con la que no todos se atreven, pero que aporta un extra de calidez y autenticidad. Y es que, gracias a la gran cantidad de acabados en madera disponibles, no es difícil dar con el tono exacto para alcanzar la combinación favorita de cada uno.
La cocina tiene un corte moderno que incorpora además tonos neutros, como el gris o el negro, en la que hemos jugado con los volúmenes del mobiliario y con diversos materiales, como es el caso de las estructuras metálicas que contrastan con los acabados en madera. Hemos querido llevar un poco más allá este contraste incluyendo detalles en negro en el radiador, la perfilería metálica de las estanterías, la cantonera de la cerámica, el grifo, los electrodomésticos o los enchufes, para dar al conjunto de un toque de elegancia.
Alicatados solo donde es imprescindible y una iluminación para cada ambiente
Además, queremos recalcar el uso del alicatado únicamente en las zonas más expuestas a salpicaduras, impactos o manchas, utilizando, para el resto de la cocina, papel vinílico. Una opción que, además de permitirte encontrar combinaciones muy interesantes, te permite cambiar fácilmente el look de tu cocina cuando lo desees.
Para terminar, no puede faltar una mención al trabajo de iluminación combinando luces directas e indirectas, en función de la zona a iluminar, ofreciendo así a los propietarios la posibilidad de escoger la iluminación que desean para su cocina en cada momento.