De Dietrich

La Maison De Dietrich nace en una dinastía de visionarios. Comienza en Jaegerthal, un valle al norte de Estrasburgo, por una apuesta increíble: en 1684, Johann Dietrich decide invertir en las profesiones de la fragua y decora todas sus creaciones con un cuerno de caza, creándose así el primer logotipo de la historia industrial.

La Maison De Dietrich entra en una nueva era bajo el liderazgo de Jean De Dietrich, heredero convertido en noble por Luis XV, y luego bajo el de Amélie, quien fuera la primera mujer en el sector y la responsable de integrar la importancia del diseño y de la estética en la producción industrial. Bajo este impulso decisivo, la marca ha continuado focalizándose en la innovación, la vanguardia y del «saber hacer francés».

Las fábricas francesas con más de trescientos años de historia, como la Maison De Dietrich, son muy escasas. Desde su creación hasta finales del S. XVII, la marca ha trabajado en el desarrollo de nuevas creaciones innovaciones y tecnologicas, tales como la primera cocina doméstica, el horno pirolítico y el horno de vapor saturado. En 1990, De Dietrich inventa las primeras placas de inducción.

En 2010 lanzan Piano, la primera placa con una zona complementaria libre y en 2013 la horiZone Chef, que propone entre sus innovadoras funcionalidades, cuatro modos de cocción diferentes. Un saber hacer transmitido de generación en generación que brinda, hoy en día, un grado de excelencia rara vez alcanzado.

Orgulloso de su legado y de su saber hacer ancestral, el nuevo diseño de De Dietrich la convierte en una firma estética y en un símbolo del saber hacer francés.